La
Librería de El Sueño Igualitario
El libro
es finalista al presente Premio Ciutat de Barcelona.
Editorial Base edita un libro que
cuenta los entresijos de por qué fracasó la sublevación militar en Barcelona, más
allá de la calle, en los cuarteles y entre los militares y lo hace acercándose a la figura del general
Goded. Normalmente nos hemos casi quedado solo con la parte de la historia que
nos cuenta la resistencia de la gran mayoría de la población barcelonesa que
hizo que el golpe de Estado de Franco y los suyos no fructificase, pero detrás
de la resistencia de muchos ciudadanos que estaban al lado de a los movimientos
anarquistas, libertarios, del POUM y otros partidos de izquierdas y también
catalanistas..Detrás de todo esto estuvo el fracaso de este general, Goded. Jacint Merino, analiza en este libro el por qué de este
fracaso, pero no tanto desde el punto de vista de los resistentes en las
calles, la gente…más bien lo hace desde la perspectiva de los propios militares
que fracasaron , bajo el mando del general Goded. El libro nos narra, nos
describe y revela no pocas cosas que son
tremendamente semidesconocidas por el común de la
gente, pero que, ahora y aquí, hace nuestras por el trabajo de investigación en
archivos y demás que el historiador Merino ha venido llevando a cabo….Así,
cuando llegue el próximo 18 de julio y en días después ya nada volverá a ser
igual si miramos a Barcelona , desde el punto de vista de lo militar y
preguntándonos, con más datos que nunca en nuestras manos, qué es lo que fue
pasando….
Qué nos dice la editorial del libro de Jacint Merino:
¿Por qué el alzamiento militar de julio de 1936 fracasó en Barcelona?
¿Qué papel jugó el general Goded en el alzamiento? La presente obra nos desvela
los entresijos del fracaso del alzamiento de julio de 1936 en la capital
catalana, desde la fase conspiratoria hasta el alzamiento militar, así como los
nombres clave de los dirigentes de la sedición en Cataluña. Con la figura del
General de División Manuel Goded Llopis como eje del
relato, Merino nos explica qué pasó el 19 de julio en Barcelona; la llegada a
la ciudad del general Goded desde Mallorca cuando ya hacía horas que se luchaba
en las calles de Barcelona; y cómo se produjo la rendición de los militares
sublevados. Goded, detenido y encarcelado a bordo del barco-prisión Uruguay,
sería sometido a un Consejo de Guerra. El autor nos explica con detalle los
interrogatorios y el proceso judicial que finalizaría con la sentencia a la
pena máxima. Goded murió fusilado después del alzamiento en los fosos del
Castillo de Montjuïc.
El autor:
Jacint Merino Sánchez es doctor en Historia por la Universidad
Autónoma de Barcelona con la tesis El fracaso del alzamiento militar de julio
de 1936 en Cataluña: el General Manuel Goded Llopis,
el final de un militar golpista que fue seleccionada por el Premio de Historia
Ciudad de Barcelona (2011) que convoca el Ayuntamiento de Barcelona y por el
Premio Artola 2011 que convoca la Asociación de Historia Contemporánea
(Universidad de Cantabria). Asimismo fue finalista de los Premios Ejército que
convoca el Ministerio de Defensa y de los Premios Cum Laude patrocinados por
Ediciones Món Juïc. Ha
presentado distintas ponencias sobre investigación en Archivos Militares (X
Congreso de Historia Contemporánea Santander, 2010) y acerca de las nuevas
didácticas aplicadas en la enseñanza de la Historia Local (Ilustre Colegio de
Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras de Cataluña). Ha participado en el
programa Didáctica de la Historia History 13-16 de la
Schools Council (Londres), publicando sus trabajos en
revistas como L’Avenç y en congresos especializados.
Desde 2005 centra sus investigaciones en los aspectos militares de la Guerra
Civil.
Cazarabet
conversa con Jacint Merino Sánchez:
-Jacint, ¿qué te ha impulsado, mejor dicho, qué te impulsó
en su día a escribir acerca del general
de división Manuel Goded, recordemos que a él le dedicas tu tesis doctoral?
-La idea surgió cuando en mis iniciales investigaciones realizadas para
definir y concretar la temática de mi tesis, en una visita al Archivo Militar
de la Tercera Región Militar de Barcelona, solicité para consulta un legajo
relacionado con la Guerra Civil. Era un sumario abierto en 1939 y sus
dimensiones eran bastante considerables. Me extrañó su tamaño y su derivación
en diferentes piezas. Al iniciar su consulta me sorprendieron sus iniciales
diligencias. Era el inicio de un consejo de guerra que daba comienzo en 1939
contra los oficiales que en 1936 juzgaron y condenaron a muerte al General de
División Manuel Goded Llopis y al General de Brigada
Álvaro Fernández Burriel. Los legajos, según comentarios de militares del
archivo, nunca fueron consultados en su totalidad. Lo más curioso es que la
prueba inicial del fiscal es una copia mecanografiada del contenido del Consejo
de Guerra celebrado el 12 de agosto de 1936 contra los dos generales que fueron
posteriormente fusilados. Es decir, el original de dicho juicio militar se
desconoce su ubicación, o bien ha desaparecido. Sólo nos queda esa copia a
máquina realizada en antiguo papel de calco azul.
-Otro
general africanista, militar de una pieza,
pero ¿nos puedes acercar a él como persona e ideas?
-Manuel Goded Llopis era un militar preparado
técnica y tácticamente que dominaba el francés y altamente considerado por el
gobierno de la República. Miembro de una familia con dilatada tradición militar,
Goded participó muy activamente en la guerra de Marruecos. En 1925 fue
ascendido a General de Brigada cuando sólo tenía 43 años.
Golpista de vocación intrigó contra la Dictadura de Primo de Rivera,
participó directamente en la Sanjurjada de 1932, ayudó
a Franco en la represión de la revolución de Asturias de 1934 y, finalmente, en
la etapa conspiratoria previa a la guerra civil. Por ello el gobierno de la
República le destinó a las Islas
Baleares, alejándole de la Península. Mantuvo un gran hermetismo sobre su
ideología política, aunque se le puede relacionar con los sectores monárquicos
más autoritarios y vinculados a altos mandos militares rebeldes. Finalizada la
Guerra Civil se rumoreaba que en realidad Goded mantuvo, en los años previos a
la sublevación, una actitud más próxima a los planteamientos democráticos.
Su hijo Manuel Goded Alonso lo descartó con rapidez en su obra titulada Manuel
Goded Llopis, un faccioso cien por cien.
Según palabras del propio Serrano Súñer, Goded
era orgulloso, ambicioso, de pequeña estatura y ojos pequeños e intrigantes, y
al mismo tiempo inquieto y decidido.
-¿Se puede
considerar a Goded como el hombre de Franco( o más bien de Mola) para Barcelona
y Cataluña?
-Las relaciones entre Goded y Franco siempre fueron no solo tensas, sino
sólidamente enfrentadas. Mucho mejor preparado militarmente que el Caudillo,
demostró en numerosas ocasiones su alta consideración en el ámbito militar.
Sirva como ejemplo la campaña de Marruecos. En ella el entonces Coronel Goded
tenía como objetivo de una operación militar ocupar una loma donde resistían
tropas indígenas. Asimismo el
también Coronel Franco tenía idéntica misión unos kilómetros más al
este. Goded no sólo consiguió su objetivo, sino que incluso tuvo que acudir en
ayuda de Franco para completar su misión. Consecuencias: Goded será ascendido a
General de Brigada y Franco continuará como
Coronel.
Incluso cuando el 12 de agosto de 1939 son trasladados los restos de
Goded a Madrid para ser inhumados en el cementerio de la Almudena, el General
Varela informó al Generalísimo que debería hacer acto de presencia en
las celebraciones, ante lo cual Franco respondió “No estaré nunca junto a un
Goded, ni vivo ni muerto”.
-¿No crees
que fue un poco como” vendido” a apoyar la sublevación? ( o sea, como que
quizás le dieron el hueso más duro de roer, Cataluña)
-Las causas que determinaron que Goded dirigiera la sublevación en
Barcelona y no en Valencia, están, aún hoy en día, algo confusas. Parece ser
que el General González Carrasco, máxima autoridad militar en Cataluña, no era
un alto mando muy aceptado en la guarnición de la ciudad condal, en cambio la
trayectoria conspiratoria del General Goded atraía a la oficialidad sediciosa
de Barcelona. Goded era conocedor de la sólida fuerza que el movimiento
anarquista tenía en la ciudad, pero ignoraba el posicionamiento, que
posteriormente, adoptará la Guardia Civil, apoyando el régimen republicano.
-¿En qué momento, más que en otros, fue fundamental o fueron fundamentales las
acciones de Goded desde Mallorca a Barcelona?
-La relación de Goded con Barcelona antes del 19 de julio del 36 fue
mínima y, excepcionalmente, por vía telefónica con el General de Brigada Álvaro
Fernández Burriel. Erróneamente creyó, al llegar hacia el mediodía del 19 de
julio, que la ciudad catalana se hallaba bajo control rebelde. Los contactos
que tuvo con Barcelona desde Mallorca le pintaron un paisaje muy lejano de la
realidad. Si bien es cierto que semanas previas al levantamiento el General
Goded asistía con asiduidad a reuniones conspiratorias en Palma de Mallorca.
Para acudir a ellas, tanto él como su hijo Manuel Goded iban armados con
pistolas por el temor a ser descubiertos. La misma M. Pilar Goded me comentó
como diversas tardes de domingo acompañaban a su padre a estas reuniones. En un
principio Goded preparó el alzamiento en Valencia. Cambiar su destino a
Barcelona, pocos días antes de la sublevación, sin duda influyó en su posterior
fracaso.
-¿Cómo fue
la actitud y las acciones emprendidas por los militares sublevados en Barcelona
a las órdenes de Goded?
-Dominaron actitudes dubitativas y de excesiva confianza en sus
actuaciones. Creyeron, equivocadamente, que únicamente saliendo a las calles de
Barcelona, controlarían en horas la situación. Más o menos de forma parecida a
1934. A pesar de todo, la oficialidad de la ciudad condal involucrada en el
levantamiento militar planificó con detalle y minuciosidad la sublevación
militar. El ejército valorará excesivamente sus propias iniciativas operativas
en torno a la sublevación, dejando en segundo término la respuesta civil.
Cierta inoperancia y descoordinación de la oficialidad rebelde facilitó que
información relativa al levantamiento llegara a oídos de fuerzas leales a la
República. Incluso miembros de la Guardia de Asalto llegan a detener a un
oficial que disponía de armas y de un plan detallado del inicio de la sedición.
-¿Qué le
falló a Goded como general?
-Como general no erró en nada, pero actuó con excesiva confianza en sus
mandos subalternos y el cambio de destino, de Valencia a Barcelona, sin duda
influyó decisivamente en el fracaso del levantamiento militar. A su llegada a
Barcelona, infravaloró la oposición de las milicias anarquistas y comprobó,
durante las primeras horas de la rebelión, que los objetivos marcados con
anterioridad no se iban consiguiendo.
-La pregunta parece retórica, pero no lo es:
Principalmente ¿Por qué fracasaron los sublevados, desde tu punto de vista?
-Fueron diversas las causas que influyeron decisivamente en el fracaso
de la sedición militar en Barcelona. En primer lugar el enorme peso que
protagonizaron las milicias anarquistas en la defensa de las principales calles
de la ciudad, ante la excesiva confianza de las fuerzas sublevadas.
Posteriormente, el posicionamiento de la Guardia Civil al lado del régimen
también será decisivo. No nos hemos de olvidar de otros factores que
determinaron la victoria de las fuerzas leales republicanas como fueron la
ausencia de una dirección firme y eficaz en el bando rebelde, la falta de una
coordinación minuciosa en el movimiento de tropas y el eficaz planteamiento de
las fuerzas leales a la República mucho mejor adaptadas a la lucha urbana.
-¿Qué
hubiese pasado entre los militares en Barcelona de haber ganado la sublevación,
y qué medidas crees que hubiesen podido
tomar ante a la población civil que se
echó a la calle en contra de la sublevación?
-Sin duda alguna la durísima represión que ejercieron las tropas
franquistas a partir de 1939 se hubiera adelantado a 1936. Si hubiera caído
Catalunya al inicio de la Guerra Civil, con toda seguridad la guerra no se
hubiera prolongado durante tres durísimos años. La población civil,
mayoritariamente, huiría hacia la frontera con Francia, tal y como hizo en
1939, y un sector civil vinculado a los militares sublevados, carlistas
fundamentalmente, hubieran protagonizado la construcción del nuevo estado
fascista. En definitiva, podríamos decir que los sucesos de postguerra del 39
hubieran tenido lugar a finales del 36, posiblemente con mayor dureza y represión.
-¿Cómo fue su papel, su actitud (me refiero a
la de Goded), cuando vio perdida su particular batalla en Barcelona?
-Se rindió de inmediato emitiendo por radio una breve comunicación
exonerando a sus tropas del compromiso que los vinculaba con la sublevación
militar. Previamente intentó reconducir la situación requiriendo tropas a la
guarnición de Mataró intentando, a la vez, que los hidroaviones que le habían
trasladado desde Palma de Mallorca se elevaran nuevamente y bombardearan
centros neurálgicos de la ciudad condal: Palacio de la Generalitat,
Ayuntamiento, Correos, etc.
Incluso, como último recurso, intentó que la Guardia Civil reconsiderara
su apoyo a la República y se uniera a los alzados. En este sentido las conversaciones
que mantuvo con el General Aranguren no provocaron ningún cambio en la postura
de la Guardia Civil. Todas estas acciones fueron infructuosas y la rendición
fue inevitable. Por ello ante el Presidente de la Generalitat Lluís Companys, Goded declarará radiofónicamente:“La suerte me ha sido adversa, y yo he
quedado prisionero. Por tanto si queréis evitar que continúe el derramamiento
de sangre, los soldados que me acompañabais quedáis libres de todo compromiso”.
-Jacint, acerca un poco a nuestros lectores al final de este
general…. Supongo que investigando a Goded te habrás hecho una idea de cómo era
como persona, ¿qué nos puedes decir?
-De naturaleza y trayectoria castrense conspiratoria, muy bien preparado
a nivel técnico-táctico militar y con dilatada experiencia bélica adquirida en
las campañas de Marruecos. Vinculado familiarmente al ejército ya que su
abuelo, Manuel Goded Ladrón de Guevara fue Coronel de Artillería en Puerto Rico
y su propio padre, Miguel Goded Ladrón de Guevara, Comandante de la misma arma.
El General
Goded era el tercero de seis hermanos, iniciando su carrera militar a los 14
años ingresando en la Academia Militar de Infantería en 1896. En 1926 ascendió
a General de División por méritos de guerra en las Campañas de Marruecos,
convirtiéndose en uno de los generales más jóvenes de Europa. Ofreció su apoyo
y colaboración a la dictadura militar de Primo de Rivera, para poco después
intrigar contra él. Por ello fue juzgado y destinado a la reserva. Durante la
segunda república fue restituído y nombrado jefe de
Estado Mayor Central del Ejército, pero su participación en la Sanjurjada (golpe
militar del general Sanjurjo en Sevilla el 10 de agosto de 1932) provocó su
nueva retirada de la vida militar.
Hacia las siete y media de la mañana del 18 de julio Goded hizo público
en Palma de Mallorca el bando de declaración del estado de guerra. Poco
después, hacia las diez y media de la mañana un hidroavión Savoia
SM lo trasladó, junto a su hijo Manuel Goded Alonso, a la capital catalana para
encabezar la insurrección militar en Barcelona.
-¿No crees
que hubo mucho de venganza y envidias entre los que podríamos llamar
“compañeros de armas” a la hora de señalarlo, apresarlo, juzgarle y ser
sentenciado?
-No lo creo. La oficialidad de Barcelona que constituyó el Consejo de
Guerra no conocía en nada a Goded. Obraron siguiendo escrupulosamente el
articulado del Código de Justicia Militar de 1890, vigente en la época. El
papel dirigente del General Manuel Goded Llopis en el
alzamiento militar de Barcelona fue de una evidencia incuestionable.El
proceso sumarial número 11.272 que se instruye contra el magistrado Luis
Pomares Pérez en 1939 por haber formado parte del Consejo de Guerra que
condenaron a los Generales Goded y Burriel,
recoge abundante documentación vinculada a la sublevación militar en Barcelona.
En las propias declaraciones de Goded en su juicio manifiesta desconocer
a la mayoría de oficiales y jefes militares detenidos por estar vinculados a la
sublevación militar. Los miembros que formaron parte del Consejo de Guerra que
condenó a muerte al General Goded serán juzgados, también en Consejo de Guerra,
en 1939, pero curiosamente el propio General Franco el 25 de septiembre de 1939
conmutará todas las penas de muerte
aplicadas contra diversos
imputados. En 1942 a varios condenados les serán concedida la libertad
condicional y a partir de 1948, de forma progresiva, el resto de encausados
serán puestos en libertad condicional o vigilada. Posteriormente familiares de
estos militares solicitaran el indulto a fin de obtener compensaciones
económicas correspondientes a pensiones o retiros. Los continuos
enfrentamientos que siempre existieron entre Goded y Franco, sin duda, tuvieron
mucho que ver en esta “suave y débil” represión contra los citados militares.
-Una
pregunta me quedaba en el tintero de marera perenne:¿ Por qué
insistes en que la represión hubiese sido más fuerte y cruenta, por parte de
los sublevados de haberse hecho con el poder en el 36 que lo fue,
posteriormente en el 39? Y qué, de todo ello, se le hubiese podido atribuir al
General Goded?
-Estimo que hubiera sido más cruenta
y represiva por los propios comunicados que los altos mandos rebeldes
redactaron semanas antes de iniciarse la sublevación. En abril del 36 el propio
General Mola remite una nota a guarniciones y oficiales que incluye el
siguiente párrafo: Se tendrá en cuentas que la acción ha de ser en extremo
violenta, para reducir lo antes posible al enemigo, que es fuerte y bien
organizado. Desde luego, serán encarcelados todos los directivos de los
partidos políticos, sociedades o sindicatos no afectos al Movimiento. (Jacinto
Merino "Los militares se sublevan en Barcelona" págs. 49/50)
Al General
Goded se le puede atribuir toda la responsabilidad de la rebelión en las Islas
Baleares y Cataluña. Incluso, horas antes de salir de Palma, dio instrucciones
muy precisas sobre los actos represivos que debían llevarse a cabo en Mallorca
para sofocar cualquier foco contrario al Movimiento.
15823
Los militares se
sublevan en Barcelona. El general Manuel Goded Llopis
y el 19 de julio de 1936. Jacint Merino Sánchez
308 páginas 16 x 24 cms.
20,00 euros
Base
¿Por qué el alzamiento militar
de julio de 1936 fracasó en Barcelona? ¿Qué papel jugó el general Goded en el
alzamiento? La presente obra nos desvela los entresijos del fracaso del
alzamiento de julio de 1936 en la capital catalana, desde la fase conspiratoria
hasta el alzamiento militar, así como los nombres clave de los dirigentes de la
sedición en Cataluña. Con la figura del General de División Manuel Goded Llopis como eje del relato, Merino nos explica qué pasó el
19 de julio en Barcelona; la llegada a la ciudad del general Goded desde Mallorca
cuando ya hacía horas que se luchaba en las calles de Barcelona; y cómo se
produjo la rendición de los militares sublevados. Goded, detenido y encarcelado
a bordo del barco-prisión Uruguay, sería sometido a un Consejo de Guerra. El
autor nos explica con detalle los interrogatorios y el proceso judicial que
finalizaría con la sentencia a la pena máxima. Goded murió fusilado después del
alzamiento en los fosos del Castillo de Montjuïc.
Jacint Merino Sánchez es doctor en
Historia por la Universidad Autónoma de Barcelona con la tesis El fracaso del
alzamiento militar de julio de 1936 en Cataluña: el General Manuel Goded Llopis, el final de un militar golpista que fue
seleccionada por el Premio de Historia Ciudad de Barcelona (2011) que convoca
el Ayuntamiento de Barcelona y por el Premio Artola 2011 que convoca la
Asociación de Historia Contemporánea (Universidad de Cantabria). Asimismo fue
finalista de los Premios Ejército que convoca el Ministerio de Defensa y de los
Premios Cum Laude patrocinados por Ediciones Món Juïc. Ha presentado distintas ponencias sobre investigación
en Archivos Militares (X Congreso de Historia Contemporánea Santander, 2010) y
acerca de las nuevas didácticas aplicadas en la enseñanza de la Historia Local
(Ilustre Colegio de Doctores y Licenciados en Filosofía y Letras de Cataluña).
Ha participado en el programa Didáctica de la Historia History
13-16 de la Schools Council (Londres), publicando sus
trabajos en revistas como L’Avenç y en congresos
especializados. Desde 2005 centra sus investigaciones en los aspectos militares
de la Guerra Civil.
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