La
Librería de El Sueño Igualitario
Este es
un libro diferente sobre el fenómeno del maquis en España, un libro que nos
acerca al maquis en conjunto de manera
minuciosa despejando mitos y grandilocuencias sobre lo que,
verdaderamente, fue y significó el movimiento guerrillero en España. Lo hace desde el “campo de acción”
y el estudio y la reflexión del maquis como punto de encuentro de aquellos que
no doblegaron el brazo ante la derrota, que
se echaron al monte, que tenían y retenían ideas políticas, ideologías…(
por supuesto, no solo comunistas)…y el autor hace que todo esto tome forma muy
entendible en este libro que edita Biblioteca Nueva, un libro fácil de
entender, de lectura fácil y amena , pero que nos dará muchos argumentos para
reflexionar.
Lo que
nos dice la editorial Biblioteca Nueva del libro:
La posguerra española y la dictadura de Francisco Franco muestran
que la conclusión formal de una guerra no implica necesariamente el
establecimiento de un estado de paz. Partiendo de esta base, y tomando como
referencia la guerrilla antifranquista, o maquis, este libro explora la
relación entre la guerra y la paz desde el momento en que se declara el final
de la Guerra Civil en abril de 1939 hasta que este movimiento pierde toda
efectividad política a principios de los años 50. Por lo general, el cine y la
literatura de la última década dejan claro contra qué y contra quién luchan los
guerrilleros, pero no necesariamente por qué luchan, es decir, cuál es el
modelo de estado y sociedad que pretenden implantar. Con objeto de reflexionar
sobre la faceta más puramente política, ideológica e incluso revolucionaria del
maquis, esta obra estudia distintos modelos de representación de estos
personajes como intervenciones culturales y también políticas, es decir, y en
palabras de Michel Foucault, como una continuación de la guerra por otros
medios. Más aún, y desde un análisis interdisciplinar que aborda la
configuración de estos combatientes en los discursos histórico, político y
jurídico, este libro estimula una valiosa reflexión sobre los límites entre la
política y su representación, y la guerra y la paz en la España contemporánea.
Narrativas guerrilleras desgrana así las claves de uno de los fenómenos más
complejos y problemáticos de la historia reciente de España, convirtiéndola en
una referencia imprescindible tanto para aquellos lectores interesados en la
recuperación de la memoria histórica, como para quienes se especializan en el
estudio de la Guerra Civil y la posguerra.
Sobre el
autor, Daniel Arroyo:
Daniel Arroyo Rodríguez es licenciado en Filología Inglesa por la
Universidad de Sevilla. Realizó su doctorado en literatura española en la
Universidad de Míchigan, Ann Arbor. Desde el año 2010 es profesor de literatura
y cultura española en Colorado College. Su investigación
se centra en el cine y en la literatura española contemporánea.
Cazarabet conversa con Daniel Arroyo:
-Daniel, hasta no hace tantos años, los guerrilleros que combatían al
franquismo desde los montes eran vistos como, ¿cómo te dría? Muchas veces, como alguien que podían llegar a complicar la existencia del resto de
conciudadanos que soportaban la dictadura como podía….¿cómo lo ves?
- Era una
cuestión de supervivencia. Necesitaban alimentos y útiles de primera necesidad
para continuar luchando contra la dictadura. Necesitaban apoyos en el llano, lo
que comprometía a muchos que acababan torturados o asesinados por el régimen
por ayudar a los guerrilleros. La guerrilla era también una continuación de la
guerra y ello implicaba grandes sacrificios para todos, guerrilleros y gente
del llano. Sacrificios que eran necesarios ante la barbarie franquista. No
niego que los guerrilleros pudieran cometer abusos. Pero ese no era ni el
propósito ni la razón de ser de la guerrilla, por lo que estos casos deben evaluarse
de forma puntual y sin generalizar sobre la totalidad de este colectivo.
Por otro
lado, es injusto culpar a la guerrilla por las torturas y las condiciones de
vida que imponía el régimen en las zonas civiles para luchar contra el maquis. Errico Malatesta decía que la
violencia más extrema consiste en poner a otro en la terrible necesidad de
matar o morir. Eso hizo la dictadura, además de aterrorizar a gran parte del
pueblo durante décadas. Mirando hoy atrás, pienso que debemos recordar a los
guerrilleros por lo que fueron: ciudadanos que no se conformaron con la derrota
ni se doblegaron ante un poder ilegítimo e ilegal que basó su poder sobre la
fuerza y el terror. La guerrilla era un colectivo político que confrontó al
régimen con una lucha legítima. No eran delincuentes ni parásitos sociales como
tantas veces se ha dicho.
-Sin lugar a dudas
yo los veo como un claro enemigo político, aún teniendo en cuenta que
para las gentes que vivían en masías y demás..pues no debían de ser un
colectivo que, aunque se simpatizase, pues les ponía un serios aprietos….
- Las
masías y otros espacios rurales estaban en el límite entre el estado de guerra
del monte y la supuesta paz del orden civil. En términos de guerra, era tierra
de nadie, un espacio muy difícil para la supervivencia. Sin duda, quienes
habitaban estos espacios sufrieron la represión brutal del régimen. Y con
frecuencia daban los alimentos que no tenían a la guerrilla, o bien
voluntariamente o por obligación. Tanto la guerrilla como los aparatos represivos
del régimen recurrían con frecuencia a masoveros, campesinos y pastores para
conseguir información y con frecuencia utilizaban la violencia. Muchos
masoveros y campesinos acabaron uniéndose a la guerrilla para huir de la
represión del régimen. No hay duda que estos hombres y mujeres debieron pasarlo
muy mal y por ello comprendo que puedan tener esta perspectiva de la guerrilla
como un colectivo que los comprometía. El miedo, las palizas, la desesperación,
el cansancio ante una guerra que parecía que nunca iba a acabar… todo esto
llevó a muchos de estos colaboradores a perder la perspectiva política de la
lucha y a culpar a la guerrilla del infierno que vivieron. No olvidemos, sin
embargo. que fue la dictadura la que causó todo esto y que la guerrilla, al luchar
contra el régimen, luchaba también contra la represión.
El
discurso histórico, la literatura y la memoria colectiva tiene una deuda con la
gente del llano que ayudó a la guerrilla. Sin ellos, la lucha armada contra la
dictadura no habría durado ni un año.
Gracias a la colaboración de tanta gente anónima la lucha duró más de
una década y, durante este tiempo, muchos españoles y españolas, mantuvieron la
ilusión de vencer al régimen en momentos muy difíciles.
-El maquis fueron libertadores en Francia y aquí
“bandoleros”……tan bien actuaba el escarmiento por parte del régimen franquista?
- La
degradación de la guerrilla a la condición de “bandolerismo” en el discurso
franquista no fue un proceso tan simple como muchas veces se piensa. De hecho,
para degradar a los guerrilleros a la condición de bandoleros, el régimen
recurrió tanto a sus aparatos ideológicos como represivos. La persuasión, el
adoctrinamiento, la propaganda y la represión actuaron conjuntamente para
construir un discurso público y oficial que criminaliza a la guerrilla. Por
ejemplo, durante la dictadura se concedieron premios y subvenciones a novelas y
películas que degradaban la imagen de la guerrilla, independientemente de la
calidad de estas obras. Algunas de las novelas que fueron premiadas durante la
dictadura y que criminalizan a los guerrilleros fueron “La paz empieza nunca”
(Premio Planeta, 1957), “Testamento en la montaña” (Premio Concha Espina,
1955), “El mundo de Juan Lobón” (Premio de la
Crítica, 1967), etc. El discurso periodístico e historiográfico también apoyó
esta degradación de la guerrilla, representando a los combatientes como
vulgares bandoleros. Más aún, y en el plano represivo, el régimen empleó a la
Guardia Civil, no al ejército, para combatir a la guerrilla. De este modo, la
dictadura negó a la guerrilla su condición política y militar, y la redujo a un
fenómeno delictivo.
Efectivamente,
esta representación de la guerrilla en España como delincuentes (e incluso como
terroristas) contrasta con su percepción en Francia como héroes. De hecho, y
con el propósito de evitar que esta percepción heroica se extienda a España
tras la Segunda Guerra Mundial, el régimen desvincula ambos fenómenos,
glorificando su actuación al norte de los Pirineos y degradándolos social y
biológicamente en su territorio. No olvidemos que el Régimen trata de
congraciarse con los vencedores de la Segunda Guerra Mundial y cuestionar a la
heroicidad de la resistencia antinazi no ayudaba a
este propósito. Esto lleva a inconsistencias por parte de autores franquistas
que nada deben sorprendernos. En su obra sobre el maquis, por ejemplo, el
historiador de la Guardia Civil Francisco Aguado se refiere al guerrillero
español Cristino García como “héroe nacional de Francia y forajido español al
servicio del comunismo” (Maquis 80).
Esto se
complica también durante la incursión del Valle de Arán, cuando los mismos
individuos que luchan en Francia vuelven a España a luchar en lo que supone un
paso lógico en la lucha contra el fascismo. En esta ocasión, y dada la
envergadura de este proyecto militar, el régimen recurre al ejército, lo que
supone un reconocimiento implícito de la naturaleza militar de la guerrilla. Ya
sabemos que este proyecto fracasó, pero al menos le quitó el sueño al dictador
e hizo cuestionar a muchos el futuro de la dictadura franquista.
-Ya había maquis, algunos, antes
de la incursión por el Valle d ´Arán: algunos de los que no habían marchado al
exilio y se habían quedado a resistir y a luchar contra el régimen franquista…
- Por
supuesto. La resistencia armada surge durante la propia Guerra Civil, conforme
avanza el ejército golpista. Sin embargo, es importante tener cuidado con la
palabra maquis, ya que este término
puede llevar a pensar que la resistencia antifranquista es una continuación de
la resistencia anti nazi en Francia. El propio Partido Comunista promovió esta
idea con el propósito de estimular una intervención internacional en España,
como si se tratase de un capítulo más de la Segunda Guerra Mundial. El régimen
hizo lo mismo, pero para enfatizar que el maquis no era un movimiento interno
de resistencia sino una invasión foránea.
La
incursión del Valle de Arán cumple una función clave en esta interpretación
generalizada de la guerrilla como maquis.
Así, este proyecto militar y político es producto del optimismo que produce la
derrota del eje nazi-fascista en la Segunda Guerra Mundial.
De hecho, el PCE— que es el que organiza este proyecto bajo el paraguas
ideológico de la Unión Nacional Española (UNE)— lo plantea como una continuación
de la lucha anti nazi y antifascista que acaba de tener lugar en Europa. En
este sentido, referirse a los combatientes que participaron en este proyecto
militar como maquis es política e
históricamente consistente.
Sin
embargo, esta operación militar tan sólo duró unos días, mientras que la
guerrilla que ya tenía lugar dentro de España duró más de una década. Esta
última actuaba también de forma muy diferente a como se hizo en el Valle de
Arán: en pequeños grupos y no como un ejército de miles de hombres. Por
consiguiente, cuando utilicemos el término maquis
debemos tener cuidado de no privar a
este fenómeno de su especificidad histórica y política, ni de reducirlo a un
calco de su equivalente en Francia. Con esta clarificación, por supuesto que el
maquis existía en España antes de la incursión del Valle de Arán. Aunque no se
utilizara esta palabra en España antes de 1944.
-Pero el maquis ¿fue realmente un productor del partido comunista, aunque no
todos fueren al 100% comunista…?
- El PCE
fue el único partido que apoyó la resistencia armada en el interior de España,
lo que lleva a muchos guerrilleros, independientemente de su ideología, a
participar en su proyecto. Sin embargo, la guerrilla no fue un invento del PCE.
El PCE recicla un movimiento que ya existe antes de 1944 y trata de ajustarlo a
sus propósitos políticos, arriesgando el mínimo posible de sus números. De
hecho, el apoyo logístico que aportó esta agrupación fue limitado, ya que una
nueva derrota militar podría haber sido definitiva para esta agrupación.
En
cualquier caso, El PCE, reviste a la guerrilla de un discurso político y
establece una hoja de ruta que, si miramos algunos de sus órganos de propaganda
y difusión ideológica, iban más allá de la lucha antifranquista y de la
reinstauración del orden legítimo de la Segunda República. Existe material de
archivo suficiente para afirmar que, para el PCE. la lucha contra la dictadura
no era un fin, sino un medio para crear un nuevo modelo de Estado y sociedad de
corte revolucionario. En este sentido, el apoyo del PCE a la guerrilla no fue
desinteresado. Acabó convirtiéndose en una arma de doble filo.
-He leído en algunos libros que las “purgas” en el
seno del maquis también fueron significativas..
- Es
parte de la historia oscura del PCE. En primer lugar, tienen lugar purgas
dentro de las propias partidas, particularmente de aquellos combatientes que
cuestionan las doctrinas y directrices del partido. Se sabe que ocurrió. Pero
no queda claro cuál fue la magnitud de estas purgas, sus causas y los
propósitos a los que respondían. Tampoco he logrado comprender la actitud de
muchos antiguos combatientes que, o bien se niegan a abordar esta cuestión, o
que se refieren a la misma indirectamente y de forma parcial.
Hay
también otro tipo de “purga” más generalizada y más devastadora para la
guerrilla. Hacia 1948, el PCE decide abandonar la lucha armada, por sugerencia
del mismo Stalin, según afirma Santiago Carrillo. A pesar de ello, el partido
estimula una intensificación de la lucha armada a través de sus aparatos
ideológicos hasta 1952, lo que, con escaso armamento y sin apenas apoyo
logístico, resulta en la aniquilación de muchas partidas. Esto podría
entenderse como una “purga” implícita y a gran escala. No obstante, y con la información disponible
hasta el momento, no queda claro si se trata de un error estratégico o de algo más intencional. En cualquier caso, en
1952 el partido renuncia oficialmente a la vía armada. El periodo comprendido
entre 1948 y 1952, fundamental en la historia de la guerrilla, es quizás uno de
los más desconocidos en la historia del maquis.
Considero
que existe también una “purga” a nivel simbólico y cultural. Es injustificable,
por ejemplo, el olvido de la guerrilla en la historia oficial del PCE publicada
en Varsovia en 1960. El maquis se convierte también en una figura maldita
durante la Transición española y gran parte de la democracia. Es otro tipo de
“purga” cultural que minimiza la importancia histórica y política de este
movimiento.
-¿Cómo la imagen y el discurso de
los maquis, tras la muerte de Franco se fue “como amoldando” a los nuevos
tiempos?
- De
forma prácticamente generalizada, desaparecen los proyectos ideológicos de
izquierda que guiaron a los guerrilleros. Desaparece también el lenguaje
ideológico de la guerrilla. Por ejemplo, palabras como revolución, proletariado, lucha de clases, etc. que formaban parte
del universo ideológico de la guerrilla desaparecen de la representación de
este fenómeno. Rara vez se menciona al Partido Comunista o la propia figura del
dictador Francisco Franco. ¿Cómo entender la guerrilla dejando estos elementos
de lado?
Como
resultado, la figura del maquis se identifica más con el huido que con el
guerrillero ideológico. En la representación de maquis como huidos, la
supervivencia se sobrepone a la toma de posición política como elemento que
motiva y justifica la resistencia armada. Como máxima concesión, la ideología
queda reducida a la lucha antifranquista de modo que se entiende contra quién y
contra qué luchan los guerrilleros, pero no por qué luchan. A pesar de su
carácter antifranquista, se trata de una representación desideologizada que,
por lo general, no aborda los aspectos más hirientes y problemáticos de la
guerrilla y que se ajusta con mayor facilidad a la cultura de mercado. Como
menciona el folleto promocional de un documental sobre la guerrilla de amplia
difusión en el mercado, se busca una visión de la historia reciente de España
“al margen de ideologías políticas.” La ideología política, que precisamente
constituye la razón de ser de la guerrilla, queda así relegada a un segundo
plano en la representación cultural. Es una recuperación de la memoria
histórica ideológicamente descafeinada.
-Plumas como la de Almudena Grandes y Alfons Cervera han hechos mucho por el fenómeno del maquis:
por ponerlos en su sitio, humanizarlos y despojarlos de no pocos perjuicios…
¿qué nos puede decir?
- Tanto
Almudena Grandes como Alfons Cervera han llevado a
cabo un trabajo fundamental para la recuperación de la memoria histórica de la
guerrilla. De formas diferentes.
Además de
los aspectos que mencionas en tu pregunta, Almudena Grandes inserta la
representación del maquis dentro de la tradición literaria española. Sus guiños
a la novela galdosiana y a la literatura española del exilio en novelas como,
por ejemplo, “El lector de Julio Verne” e “Inés y la
Alegría” destacan al maquis como figura histórica y política, y no como una
curiosidad o una anomalía histórica. Cuando leí estas novelas, entendí que el
maquis es una figura tan digna de ser sujeto de la historia y de la literatura
como los guerrilleros de la Guerra de la Independencia.
Almudena
Grandes también ficcionaliza algunos de los episodios
más oscuros del PCE, recurriendo para ello a fuentes historiográficas
relevantes. Aborda también un lenguaje político e ideológico que otros autores
y autoras eliminan de sus narrativas. Todo ello, unido a la calidad de su
estilo narrativo, hace de las novelas de Grandes una contribución esencial a la
recuperación de la memoria histórica de la guerrilla y a la dignificación de
estos combatientes.
Alfons Cervera aborda aspectos
sumamente dolorosos de la historia de una forma directa y con la belleza de una
prosa sin florituras innecesarias. Las
novelas de Cervera no se limitan a representar o reconstruir la memoria histórica:
la ejercita en la propia sintaxis de su narrativa y fuerza al lector/a a
participar en este proceso. Más aún, Cervera construye historias que no se
pueden dar por saldadas con el mero recuento de los acontecimientos. Por
ejemplo, la historia de Angelín, un niño a quien, en la novela “Maquis,” la
Guardia Civil le quema las uñas en represalia por una acción del maquis. Su
sufrimiento queda marcado, no sólo en el color azul que le queda en las uñas
hasta la edad adulta, sino en la memoria de todo el colectivo. Es un sufrimiento
que emerge continuamente en los relatos de los distintos personajes que
aparecen en sus novelas. Un sufrimiento que ningún lector/a responsable puede pasar por alto.
Por otro
lado, Cervera no hace concesiones ni al consenso ni a lo que más reciente ha
venido a llamarse de forma crítica como “la cultura de la transición.” Nunca
entendí bien eso de la reconciliación y mucho menos eso del “olvido”: ¿entre
quienes? ¿en nombre de quienes? ¿en qué términos? ¿con qué derecho? Basta ya de
hablar de la dictadura como si estuviéramos pisando huevos. En las novelas de
Cervera no hay borrón y cuenta nueva, ni dolor que desaparezca de un plumazo
pues, como dice Nietzsche, “solo lo que no deja de doler permanece en la
memoria.”
18930
Narrativas guerrilleras. El maquis en la cultura española
contemporánea.
Daniel Arroyo Rodríguez
200 páginas 17 x 24 cms.
18,00 euros
Biblioteca Nueva
La posguerra española y la
dictadura de Francisco Franco muestran que la conclusión formal de una guerra
no implica necesariamente el establecimiento de un estado de paz. Partiendo de
esta base, y tomando como referencia la guerrilla antifranquista, o maquis,
este libro explora la relación entre la guerra y la paz desde el momento en que
se declara el final de la Guerra Civil en abril de 1939 hasta que este
movimiento pierde toda efectividad política a principios de los años 50. Por lo
general, el cine y la literatura de la última década dejan claro contra qué y
contra quién luchan los guerrilleros, pero no necesariamente por qué luchan, es
decir, cuál es el modelo de estado y sociedad que pretenden implantar. Con
objeto de reflexionar sobre la faceta más puramente política, ideológica e
incluso revolucionaria del maquis, esta obra estudia distintos modelos de
representación de estos personajes como intervenciones culturales y también
políticas, es decir, y en palabras de Michel Foucault, como una continuación de
la guerra por otros medios. Más aún, y desde un análisis interdisciplinar que
aborda la configuración de estos combatientes en los discursos histórico,
político y jurídico, este libro estimula una valiosa reflexión sobre los
límites entre la política y su representación, y la guerra y la paz en la
España contemporánea. Narrativas guerrilleras desgrana así las claves de uno de
los fenómenos más complejos y problemáticos de la historia reciente de España,
convirtiéndola en una referencia imprescindible tanto para aquellos lectores
interesados en la recuperación de la memoria histórica, como para quienes se
especializan en el estudio de la Guerra Civil y la posguerra.
Índice, introducción y primer capítulo:
http://www.bibliotecanueva.es/admin/links/narrativas%20guerrilleras%20ALTA.pdf
Daniel Arroyo Rodríguez es licenciado en Filología Inglesa por la Universidad
de Sevilla. Realizó su doctorado en literatura española en la Universidad de
Míchigan, Ann Arbor. Desde el año 2010 es profesor de literatura y cultura
española en Colorado College. Su investigación se
centra en el cine y en la literatura española contemporánea.
INTRODUCCIÓN
...........................................................................................
13
AGRADECIMIENTOS
....................................................................................
21
CAPÍTULO 1.—NARRATIVAS CONTRAGUERRILLERAS: LA DESHUMANIZACIÓN
DEL MAQUIS EN EL DISCURSO CULTURAL FRANQUISTA .............................. 23
1.1. El maquis: ¿enemigo político o social? ...................................
25
1.2. Héroes en Francia y bandoleros en España: la representación
del maquis tras la Segunda Guerra Mundial ........................... 33
1.3. Entre la militancia y la delincuencia: La sierra en llamas, de
Ángel Ruiz Ayúcar
................................................................... 44
CAPÍTULO 2.—LA MIRADA MILITANTE: LA GUERRILLA QUE TRANSFORMARÁ
EL MUNDO ............................................................................................
53
2.1. La lucha por la revolución: el maquis en el discurso comunista 55
2.2. La mirada guerrillera: hacia la transformación en un proyecto
de masas ...................................................................................
61
2.3. La guerrilla literaria
................................................................. 65
2.4. La justicia de la sangre: La hija de Dios y La niña guerrillera,
de José Bergamín .....................................................................
70
2.5. Pueblo a pueblo por la liberación de España: Juan Caballero,
de Luisa Carnés
........................................................................ 77
2.6. El campesinado en armas: Cumbres de Extremadura, de José
Herrera Petere
........................................................................... 84
CAPÍTULO 3.—LA MIRADA RESIDUAL: EL MAQUIS EN EL CINE DE LA TRANSICIÓN .. 97
3.1. Desideologizando la política
.................................................... 99
3.2. La desideologización de la cultura democrática ...................... 104
3.3. Explorando nuevas posibilidades: el maquis en el discurso tardofranquista
y preconsensual de la Transición (1973-1977) .......
109
3.4. Eliminando nuevas posibilidades: el maquis en el discurso
posconsensual de la Transición (1978-1985)
.......................... 120
3.5. Residuos ideológicos del héroe antifranquista: El corazón del
bosque, de Manuel Gutiérrez Aragón ...................................... 124
CAPÍTULO 4.—(DES)ENTERRANDO LA VOZ DEL MAQUIS: CONSENSO Y DISIDENCIA
EN LA LITERATURA DE LA DEMOCRACIA ...................................... 141
4.1. Entre la política y el mercado: la recuperación de la memoria
histórica ....................................................................................
144
4.2. La reconstrucción del maquis en el mercado cultural ............. 152
4.3. El mercado al borde del consenso: Inés y la alegría y El lector
de Julio Verne, de Almudena Grandes
..................................... 157
4.4. Más allá de los límites del consenso: Maquis de Alfons
Cervera 166
BIBLIOGRAFÍA
............................................................................................
185
_____________________________________________________________________
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c/ Santa Lucía, 53
44564 - Mas de las Matas (Teruel)
Tlfs. 978849970 - 686110069